hoy salimos con las chicas y cada una llevó su flor amarilla que yo le regalé con amor cariño y un poco de besos en el cachete y también cada una menos reyo llevó su hermosísimo chupetíin con forma de conejito que reyo nos regaló (porque por supuesto que yo me compré flores a mí para no celar a mis amigas en el propio día del amigo)
y fuimos a vicente lópez y comimos lomitos en carlitos y no tomamos licuado
y reyo se pidió uno re ostentoso con panceta y huevo porque cómo puede ser que no le guste el jamón pero sí la panceta y además lo que ellos llamaban panceta en el menú resultó ser un preparado de cebolla y panceta y quién sabe qué más que a la señora no le gustó
yfiore y yo compartimos uno pero yo quería con tomate y lechuga y ella quería con queso pero con queso medio no se podía y entonces ella lo pidió solo y nos lo trajeron ya cortado y era bastante bastantísimo más chico que la mitad del de reyo, y todos reímos de lo mal que nos llevaríamos con reyo en un baño de hombres, pero nadie se quedó con hambre.
luego tomamos mate con una yerba extraña a la que hubo que ponerle azúcar, porque la tenía que llevar yo y me olvidé y en la casa de fiore no suelen tomar mate.
y jugamos al chinchón y les pasé el trapo en la única mano que jugamos y no quisieron anotar, porque mis amigas serán buenas y todo lo que quieras, pero no se toman el chinchon suficientemente en serio, con decirte que cuando viramos al truco la fresca de julieta se dignó a decir "mejor ahora me siento porque no quiero que me vean las cartas"
luego de muchas otras cosas que no serán contadas y muchas fotos lindas y bonitas y algunas medio top por los megapop anteojos feriamericanosos de clarita, subimos nuevamente al tren en donde al salir mi boleto pasó pero no hizo girar el coso y un chabón puso el suyo sin darse cuenta y pasé yo, y yo le di el mío pero no andaba y después de una confusión momentánea le dí el mío de ida que no había usado al salir y nada, funcionó y todos reímos de buena gana y comimos perdices.
la velada no terminó ahí, y no ha terminado todavía, ya que no sólo hicimos en la casa de fiore el licuado que nos había quedado pendiente, sino que estoy preparandome física y mentalmente para el kilo de helado de dulce de leche granizado o con brownie y chocolate amargo, y seguramente durazno y naranja, aunque no creo que me permitan sambayón y espero que a la loca de mierda no se le ocurra mentagranizar porque no se lo voy a permitir.